Un correntino de ley que transcendió las fronteras del básquet. Así podemos despedir a Raúl Esteban Guitart, que nos dejó a los 60 años porque una embolia cerebral no le permitió hacer su última bandeja. Lo llaman “Lepe”, pegadizo apodo que consiguió tras “igualarse” con el brasileño Pelé por la cantidad de títulos que “iban cosechando”.
Ese “Buenaaa flaco” que cautivó a los seguidores de Lanús y Gimnasia y Esgrima de La Plata en la década del ’70, se repitió en muchos partidos donde el “Lepe” fue figura.
Alero aguerrido (medía 1.95 en su mejor momento), alcanzó varios títulos con el “granate” y el tripero: campeón del Metropolitano 1976 y Argentino de Clubes en 1977 lo llevó a ser ídolo de Lanús, mientras que también capturó al hincha del “lobo platense” formando parte de una etapa ganadora del club: bicampeón del Metropolitano 1978 y 1979 (junto al misionero Ernesto “Finito” Gehrmann) y obtuvo el Oficial 1984, en vibrantes duelos con Obras Sanitarias, Ferro Carril Oeste y San Andrés, meses antes que otro correntino, Osvaldo Ricardo Orcasitas (justamente O.R.O siempre lo recuerda de la mejor manera), fuera uno de los puntales para la creación de la Liga Nacional de Básquetbol.
Esta valoraciones lo llevaron a se convocado para integrar el seleccionado nacional y hasta se dio el lujo de jugar un torneo mundial. Fue en Puerto Rico 1974, donde disputó 6 partidos (solo no jugó ante Estados Unidos) y marcó 28 puntos en aquel equipo de Miguel Angel Ripullone que sumaba experiencia con el propio Gerhmann, Alberto “Mandrake” Cabrera y ya aparecían Eduardo Cadillac, Carlos Rafaelli y Adolfo Perazzo. Argentina quedó 11º y la prensa mundial los elogió.
Cosechó varios títulos con Capital Federal en torneos argentinos y con la selección también disputó el Panamericano de México 1971 (dirigidos por Abelardo Dasso), los Sudamericanos de Uruguay 1971 (3º con Jorge Canavesi como coach), Colombia 1973 (2º con Ripullone como DT), Medellín 1976 (campeones) y Chile 1977 (3º ya con la conducción de Heriberto Schonweis).
Tanta historia, tantos años recorridos que vale la pena tomarlo para todo el básquet argentino. Se nos fue “Lepe”, nacido en Corrientes, hecho en Santa Fé y consagrado “en canchas metropolitanas”, como le gustaba decir. “Buenaaa flacooo”.