
Pero para los países con tradición e historia en el fútbol esta nueva tradición de mostrar a un personaje oficial parece no interrumpirse en varias competencias.
Y en esta historia de las mascotas de la Copa América comienza justamente en la ocasión anterior que Argentina fue organizadora: 1987; allí fue "Gardelito" el que mostró la faceta cultural y musical.
La historia la escriben…

Como la gran idea del fútbol, los inventores de las mascotas oficial fueron los ingleses (con el leoncito Willie en el Mundial de 1966) y como todo salió perfecto para la corona, la costumbre perduró en mundiales y se sumó en Eurocopas (desde Italia 1980 con Pinocchio 1980) en Copas Américas (desde Gardelito en el ’87) y en Juegos Olímpicos.
La historia queda marcada para las mascotas campeonas, que en el torneo americano solo fueron tres: el pajarito Tico en Brasil 1989, el fornido Torito en Uruguay 1995 y el muñeco Ameriko en Colombia 2001.
El resto, solo buenas presentaciones en los estadios: Gardelito en 1987, Huaso en Chile 1991, Choclito en 1993, Tatú en Bolivia 1997, Taguá en Paraguay 1999, Chasqui en Perú 2004 y el reciente Guaki en Venezuela 2007
Los que festejaron

Quedaron sin coronas: Juanito en México 1970, Naranjito en España 1982, Pique en México ’86, Ciao en Italia 1990, el perro de Striker en Estados Unidos ’94, los fantasmagóricos de Ato, Kaz y Nik en Japón-Corea 2002, el león Goleo VI y Pille en Alemania ’06 y el menos esperado Zakumi en Sudáfrica 2010.
En la cartelera del “Viejo Mundo”, solamente Péno pudo subir a lo más alto del podio en Francia 1984 (otra vez un gallo, símbolo nacional).
El resto, solo sirvió de mascotas y no de amuletos: Pinocchio en Italia 1980, Berni en Alemania 1988, Rabbit en Suecia ’92, el inglés Goaliat en 1996, el poco entendible Benelucky en Bélgica-Holanda 2000 (fue un león holandés con cola y cuernos de diablo belga), Kinas en Portugal 2004 y los modernos amigos de Trix y Flix en Austria-Suiza 2008.
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